Beitragsbild.jpeg

La historia

El queso alpino se considera un precursor del queso duro y semiduro. La primera prueba escrita de que el uso de los Alpes ya estaba muy arraigado en la sociedad rural del Tesino y que, por lo tanto, el queso alpino se producía en esa época, data del siglo XII. La necesidad absoluta de utilizar todo el territorio obligó a los habitantes de la región alpina a llevar todo el ganado, incluido el vacuno lechero, a la producción de queso en las zonas más altas durante el verano. Se mantuvieron gradualmente en diferentes niveles (corti) de la misma montaña. La distancia de las zonas de asentamiento y la necesidad de producir productos duraderos condujeron al desarrollo de la tecnología correspondiente y, por lo tanto, a la producción de queso alpino.

En su descripción de la Suiza italiana de 1783 a 1787, Schinz menciona el queso y el uso de los Alpes en los distritos del cantón del Tesino donde se elaboró este producto. Sus datos se ven confirmados por las descripciones de los Alpes y de las técnicas de fabricación de quesos. En un capítulo del libro «Gotthard End su Biasca e Ia Val Pontirone», publicado en 1920, se describe detalladamente el método de producción del queso alpino. Con la excepción de las normas de higiene introducidas a lo largo del tiempo y los nuevos conocimientos microbiológicos en los ámbitos de la higiene y la producción de queso, esto corresponde esencialmente a los métodos actuales.

El Embajador del Tesino

El formaggio d'alpe ticinese puede describirse con razón como el embajador de la agricultura de montaña en el cantón del Tesino. Su peculiaridad se debe a las características específicas de la flora de los pastos alpinos y al método de producción. En los Alpes del Tesino, a una altitud de entre 1500 y 2400 metros sobre el nivel del mar, crecen muchas hierbas sabrosas y ricas en especies. En un pasto alpino se pueden encontrar hasta 250 variedades de plantas diferentes, mientras que en un pasto de valle hay un máximo de 20 de ellas. Y es precisamente esta biodiversidad, que puede cambiar de montaña a montaña, la que confiere al queso sus extraordinarios, únicos y singulares sabores y aromas.

No solo es bueno, también es saludable. Según las últimas investigaciones realizadas en colaboración con ALP Liebefeld, se ha descubierto que contiene muchos ácidos grasos insaturados (CLA, Omega 3 y Omega 6), que son muy importantes para nuestra salud.

El queso alpino del Tesino es mucho más que un plato maravilloso, es la expresión auténtica del apego de un producto al terruño. Es un arte, un estilo de vida. Es cultura, tradición y naturaleza pura.

Recetas con Queso alpino del Tesino AOP

  • STEA Società Ticinese di Economia
  • Alpestre
  • 6955 Cagiallo